MENSAJE DEL DÍA 16 DE JULIO DE 1984

EN PRADO NUEVO DE EL ESCORIAL (MADRID)

 

     LA VIRGEN:

     Hijos míos: sacrificio y penitencia.

 

     LUZ AMPARO:

     ¡Ay, ay, ay...! (Se lamenta durante unos instantes). Me abrasa. ¡Ay, ay, ay...!

 

     LA VIRGEN:

     Con vuestro sacrificio y con vuestra penitencia, mirad las almas que salen a gozar de las moradas celestiales...

     Mi imagen está reflejada en el Sol. Mirad qué colores más maravillosos, hijos míos: azul, rosa, amarillo... (Se escucha un murmullo entre los presentes). ¡Qué maravilla, hijos míos! Decid lo que veáis; no seáis fariseos.

 

     LUZ AMPARO:

     ¡Ay, ay, ay, María...!

 

     LA VIRGEN:

     Besa el suelo... ¡Qué rosa más maravilloso, hijos míos!

Os voy a dar mi santa bendición.

     Os bendigo, hijos míos, como el Padre os bendice por medio del Hijo y con el Espíritu Santo.

     Adiós, hijos míos. ¡Adiós!